Máximo Laureano.
Ha corrido como pólvora la información de que un militar de la República Dominicana, asignado a la zona fronteriza de la provincia de Dajabón con Haití, habría sido grabado mientras tenía relaciones sexuales con un hombre nacionalidad extranjera, en este caso, según ha trascendido un haitiano.
Hemos leído que el vídeo es viral y no es para menos, el morbo es más efectivo con este tipo de situaciones, cuando se alimenta de la poca formación de mucha persona que no es capaz de ver esto como un acto normal de la vida.
Han anunciado de inmediato que el guardia lo botaron de la institución y esa acción es aplaudida por muchos sectores y que se cuides el guardia, porque podrían hasta pedir que lo cuelguen en una plaza pública, porque se trata de un caso en el cual, los “machotes” dominicanos, deben cuida su honra.
Leer cada uno de los titulares en las redes sociales, sobre este caso, debería ser motivo de risas, porque el hecho de que lo hayan filmado, no pasa de ser un episodio jocoso, pero más bien debe verse como preocupación en una sociedad que no avanza.
Creemos que si hay alguna falta del militar, debe estar sujeta a reglas de seguridad, por lo que representa su trabajo, como vigilante de la zona fronteriza, eso no debe pasar de una sanción, porque tener sexo no es un delito y tener relaciones sexuales con una persona de su mismo sexo tampoco es una falta.
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