Por Máximo Laureano
El funcionario llamó a que se encare el problema de manera seria, como una prioridad, para evitar que situaciones que derivan de trastornos ligados a la personalidad dejen como resultado daños irreversibles, como la muerte.
“Un tema que me ha preocupado es la salud mental. Por tradición, a menos que tengamos algo muy acentuado, un cuadro muy marcado, algo muy específico, no se ha puesto la debida atención y creo que es una tarea pendiente del sistema justicia”, indicó el funcionario del Ministerio Público.
Propuso hacer estudios para determinar cuáles son las patologías, de personalidad o mentales, de la población carcelaria.
No obstante, Juan Carlos Bircán dijo que previo a ingresar a los privados de libertad en los pabellones, se hacen evaluaciones básicas.
Agregó que al ingresa a un privado de libertad se hace un proceso de ambientación, con una evaluación con psicólogo que da una apreciación general de las características de la persona. Dijo que ese procedimiento no determina si la persona tiene alguna patología que deba ser tratada.
Aunque el funcionario hace un enfoque dirigido a la población carcelaria, establece que en la sociedad, en sentido general, es perentorio trabajar en los aspectos de manejo de la violencia, ataques de ira, depresión y otros trastornos.
“Reitero que es una tarea pendiente, que en algún momento tendremos que asumirlo, realmente con la seriedad que amerita”, dijo Bircán, al ser preguntado sobre situaciones que se han dado en Santiago, tanto en el Centro de Rehabilitación Rafey-Hombres y la cárcel del Palacio de Justicia de Santiago.
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