“La diputada del PRM, Faride Raful, ha recibido fuertes críticas por su oposición a la lectura de la biblia en las escuelas. Pero los críticos son tan ignorantes, que no se han leído el artículo 45 de la constitución de la República que dice textualmente: “El Estado garantiza la libertad de conciencia y de cultos, con sujeción al orden público y respeto a las buenas costumbres”. Eso significa que el Estado dominicano es laico y que respeta todo tipo de religión. Imponer la lectura de la biblia es imponer un tipo de religión y crear un privilegio con una religión. Crearía un privilegio en perjuicio de los ateos, musulmanes, budistas, y todo de creyentes que no aceptan la biblia. La constitución dominicana es clara. No puede existir privilegios ante la ley. Pero además la lectura de la biblia queda en el ámbito de lo personal y la familia. No está en el ámbito de lo estatal. Por favor, cuando vayan a criticar, por lo menos,. lean los textos originales”, Esteban Rosiario, periodista y escritor.
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