SANTIAGO, República Dominicana.-El danilismo de Santiago está convencido de que Danilo Medina Sánchez, ha salvado el país y por eso le implora, que siga cuatro años más. Si alguien tenía dudas todavía de la intención de los seguidores del presidente Medina, de impulsar una tercera postulación de su líder, el mitin masivo celebrado este domingo en la Gran Arena del Cibao vino a dejarlo claro.
No obstante, en la convocatoria no se habló de reelección, sino que se hizo alusión al reconocimiento a la obra de gobierno de Danilo Medina, y a asuntos de patriotismo e institucionalidad.
Los peledeistas danilistas no usaron el término “reelección” en sus discursos, pero el mensaje fue claro y todo el tiempo reiteraron que la gestión del mandatario actual ha sido la mejor obra de gobierno de todos los tiempos.
Como paradoja, algunos observaron que el local en que se celebró la actividad no es una obra de Danilo Medina, data de los gobiernos anteriores a la llegada al poder del PLD y fue remozada en el gobierno de Leonel Fernández en 2008. Desde entonces este lugar, con capacidad para unas 7 mil personas, es usado por los políticos mostrar músculos en Santiago.
Los convocados
Desde las 9:00 de la mañana se empezó a reunir la gente. Llegaron desde todos los puntos de Santiago y algunos de otras localidades. Al bajar de los autobuses, se escuchaban las normas de los guías de grupos, que les decían para qué estaban allí, y qué tenían que hacer.
Algunos llevaron sus botellas de ron, que al entrar cambiaban de envases de vidrio a plástico, norma de seguridad en los estadios.
“Siga trabajando, que usted, además de ser querido, es bastante temido, por sus adversarios, que no reconocen en usted sus grandes realizaciones”
Entre algunos convocados se manifestaron los disgustos. Ya eran las 10 de la mañana y se negaban a entrar. Alegaban que no les habían entregado lo prometido, para participar en el acto, “los chelitos”.
“Yo no voy para allá con hambre, sin saber a qué hora vamos a salir”, decía a una militante a un compañero suyo, que la conminaba a entrar de toda manera. “Hay que apoyar al líder”, le recordaba.
El acto
A las 10 con 26 minutos de la mañana, el locutor conocido con el mote de El Rubio Charlie y la joven Milly De Moya, empezaron con las arengas reelecionistsa. A las 10:40 minutos Frederick Martínez (El Pachá), en su singular estilo, derrochó “danilismo”. Poco después llegó el líder de la actividad, Julio César Valentín Jiminián, senador de Santiago, quien se ha erigido como el mayor defensor del “danilismo” y la reelección en Santiago. Pero todavía hay quienes lo señalan como desertor del equipo de Leonel Fernández Reyna, presidente Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y contendor por la candidatura presidencial.
Dos discursos antecedieron las palabras del senador Valentín, Audy Rodríguez, premio nacional de la juventud, quien describió al presidente Danilo Medina como una especie de Rey Midas, que todo cuanto ha tocado lo ha transformado para bien, agregándole valor. Y Ana María Domínguez, que prosiguió las alabanzas.
Luego tocó el turno al más esperado el senador, a quien los leonelistas han recriminado su apoyo a Danilo Medina Sánchez, al punto que algunos le han llamado mal agradecido.
Arriesgando el título
Julio César Valentín no economizó elogios hacia Danilo Medina. Una y otra vez dijo que ha sido la gestión más beneficiosa de los todos los tiempos para “los pobre de la patria”, habló de las transformaciones en el sistema educativo, la salud y la entrega del mandatario por la gente del campo, a través de la visitas sorpresas.
“En lugar de estar en su casa, con su familia, usted señor presidente, está en el campo, visitando a los pobres de la patria”, dijo el senador.
Abrió sus brazos en varias ocasiones en señal de tributo y pidió al público que respondiera a varias preguntas: ¿quién hizo la avenida Circunvalación Norte?, ¿quién hizo el Parque Central?. Y así completó una larga lista. Obvio que el público respondía a coro: “Danilo”, “Danilo”.
Sin usar la palabra “reelección” el senador de Santiago, dejó claro que su intención con este acto era mostrar la necesidad que tienen el PLD y el país de que haya un tercer gobierno consecutivo del presidnete Danilo Medina Sánchez.
“Siga trabajando, que usted, además de ser querido, es bastante temido, por sus adversarios, que no reconocen en usted sus grandes realizaciones”, dijo Valentín.
Losdanilistas lograron llenar la Arena del Cibao, aunque como en otras ocasiones recurrieron a garantizar la participación de un público joven. Esta vez el caramelo más atractivos para la muchachada fue Mozart La Para, uno de los más populares intérprete de la llamada música urbana.
Los organizadores del evento se cuidaron de no exhibir banderas ni pancartas, para dar la impresión de que no se trataba de un acto reeleccionista, pero algunos militantes presentaron mensajes con el llamado de 4 años más.
Sued, el gran invitado
Aparte de los aplausos y la algarabía del discurso central del acto a cargo de Julio César Valentín, la mayor ovación la sumó José Enrique Sued Sem, quien fuera tres veces alcalde de Santiago, 1994-1998, 2002-2006 y 2006-2010, por el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC).
Sued ha estado muy cercano al peledeísmo y especialmente al danilismo en Santiago. Primero se le ha visto con Silvio Durán, precandidato a la Alcaldía por el PLD. También se ha fotografiado con el rival interno de Durán, Fernando Rosa.
Se rumora que Sued Sem coquetea con el PLD para amarrar una candidatura a diputado.
Los artistas
Mozart La Para fue el plato fuerte en la parte de diversión del acto, quien provocó algarabía entre los jóvenes presentes, que tanto escucharon su nombre activaron la filmación en sus teléfonos móviles para quedarse con el recuerdo de ese momento. Provocó risa que algunos dirigentes del PLD, pasados de años y de libras, intentaron llevar bailar el ritmo del artista, pero sus esfuerzos no dieron el mejor resultado.
Más detalles
Como ocurrió en el encuentro de prensa del miércoles 3, Fernando Rosa y Silvio Durán, ambos danilistas en lucha por la candidatura a alcalde de Santiago, rivalizaron por el lugar donde serían ubicados. Los dos querían el asiento más visible para “buscar cámara y vitrina”.
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