Por MÁXIMO LAUREANO
Blas Durán (El Toro), refranero, jocoso, perspicaz, atrevido y creativo, resumen el pasó de Blas Durán, por la música popular, una dilatada carrera que transcurrió entre la pegada y el debate, porque el contenido de sus temas, era considerado vulgar.
Refranero, porque en cada una de sus producciones, se apoyaba de refranes populares y algunas ocurrencias, que hacían que el público pusiera atención a sus composiciones.
La jocosidad era un hilo conductor en su canto, con la cual acompañó sus interpretaciones siendo perspicaz y atrevido, pero sobre todo creativo, tenía que ver con muchos de los arreglos de sus temas musicales y de los primeros bachateros en instrumentos como piano, trombón y la guitarra eléctrica.
Siempre defendió que hacía música divertida para el pueblo, aunque en algunos segmentos sociales, se ganó el mote de, “El vulgar”, “El hombre de las malas palabras”, “El malcriado”.
Para muchos entendidos de la bachata, la cotización en los bailes de bachatas, empezó con Blas Durán, es decir, fue a raíz de su gran pegada a finales del año 80, fue que se empezó a cobrar montos significativos las presentaciones de los exponentes del llamado género del amargue.
Conocido como Blas Durán, oriundo de la provincia María Trinidad Sánchez, nacido el 03 de septiembre de 1949, empezó a interesarse en la música por medio de su primo Edilio Parades.
Blas Durán, conocido con el mote de “El Toro”, venía de ser cantante de merengue en la orquesta La Típica Dominicana, Aníbal Bravo, uno de los merengueros más sobresalientes de los años 80. Para entonces Blas Durán combinaba su participación en la orquesta de Aníbal Bravo, con las presentaciones con su grupo de bachata.
Blas Durán llegó a cosechar éxitos como bachatero en los años 70 y 80, siendo coronado con su producción “Consejos a las mujeres” en 1987, que contenía, un primer tema que daba nombre al trabajo discográfico, seguía otros temas al ritmo de bachata como “La quiero un millón”, “El motorcito”, “Que bien lo hiciste”, “Pelando pa que otro chupe”, “Esta noche me emborracho” y los merengues “Juanita”, “El salón de bella”, que era como una especie de continuación al primer tema con este título, hecho por Julio Ángel, pero con un mensaje más directo.
También sumaba los merengues como “El total”, “Palomita mañanera”, también conocido como “Yo quiero la pluma mami”. Más adelante el bachatero también grabó un tema llamado “Consejos a los hombres”.
Con cerca de 40 años de edad, llegó la gran pegada de Blas Durán con su conjunto “Los Peluches” que hacía bachatas y merengues, con una guitarra o requinto, ejecutada por Jesús Martínez, la cual pasó de la guitarra acústica tradicional, a una guitarra eléctrica, a la cual se le empezaron añadir otras características, para diferenciar el sonido.
Ya para 1989, cuando Blas Durán grabó una segunda producción, tras su gran pegada, en la cual incluía el tema “La Arepa”, “La golitera” o “La rifera”, “La Joya”, “El país”, “El colegio” y otros temas, también había sumado teclados a sus arreglos musicales.
Entre 1992 y 1993, Blas Durán había sumado un trombón a su merengues, que es muy notorio en la canción “Tiene mucho to”, para esta época su guitarrista, era Roberto Niño, porque Jesús Martínez, había salido para formar su grupo propio, en el cual grabó el tema de “De caché chaché” y otros que sonaron en la radio, para la época.
El reinado del doble sentido de Blas Durán, se fue desvaneciendo con la llegada otros bachateros que también explotaron esa línea, pero Blas Durán siguió sumando canciones a su repertorio, hasta llegar a la producción “Bachata pueblo”, en la cual trató de demostrar que podía hacer música sin doble sentido, pero el mercado ya había cambiado y el respaldo de los sellos disqueros no era el mismo.
Fragmento texto investigación obre la bachata.
ALGUNOS DE SUS TEMÁS CONOCIDOS.
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