José Rafael Sosa (Especial para Acento.com.do)
SANTO DOMINGO, República Dominicana.-Los Premios Soberano, que se entregan mañana martes en el Teatro Nacional, tras diez meses de un proceso de trabajo, coordinaciones de talentos, tienen mañana martes 19 su punto más alto: el ceremonial de entrega y la definición en torno quien debe ganar el Gran Soberano.
Los Premios Soberano siguen siendo, afortunadamente, el galardón artístico popular mas importante de la historia nacional dominicana, a pesar de los gritos y protestas de quienes, hipócritamente, los anhelan en el fondo de sus almas pero que no aceptan no ser nominados o premiados según sea el caso,
Tienen los Soberanos, ese secreto de la mística, el atractivo de un plato de miel que todos desean sorber y ratifican el encanto de ser principal éxito al que pueden aspirar quienes hacen arte popular o clásico.
Las críticas al premio, y es muy bueno que las haya, al premio cuando provienen de artistas, son hijas de una curiosa combinación de egos, competencia mal concebida e incapacidad para generar la comprensión y la tolerancia de aquellos incapaces de satisfacerse con que gane su competencia.
Producto del trabajo y el prestigio a que se debe su montaje, los Soberanos conservan su condición del espectáculo de televisión de mayor impacto y el evento mas apetecido para que sus patrocinadores, estrenen sus mejores comerciales de temporada.
La suerte está echada: quienes ganaran la estilizada estatuilla, ya están definidos por las votaciones celebradas este sábado pasado, solo que los votos (bajo custodia de un servicio notaria) para ser contabilizadas mañana en la tarde por la directiva Acroarte y el consejo de asesores de expresidentes.
El premio es el resultado de un trabajo que la gente común no llega a conocer porque su zapata organizativa se desarrolla bajo un esquema que inicia con reuniones de trabajo desde las de la directiva de ACROARTE, las que se realizan con los ejecutivos a cargo de la Cervecería Nacional Dominicana, la definición del equipo de producción, la coordinación y contratos de los talentos nacionales e internacionales, el proceso de evaluación de la labor de los artistas, los contactos para confirmar la presencia de los invitados.
Mañana es el día, o para mejor decir, la gran noche del arte nacional.
Se impone reconocer desde ya, el trabajo sin descanso de la Asociación de Cronistas de Arte y aspirar a que la entrega supere sus entregas anteriores.
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